¿Qué llevaría al
público que no están 'picados' por este deporte a verlo por televisión? ¿Porqué
hay otros deportes con mayores audiencias?
Primeramente tengo
que proclamar, antes de hacer ninguna conclusión, de la poca educación
deportiva que tenemos en España por cualquier deporte o actividad fuera del
sempiterno fútbol que tanto nos aborrece a los que nos dedicamos a esto del
deporte.
Observo el atletismo
con la lupa empática de aquel que no lo ha visto mucho y que no entiende de
esfuerzos ni de marcas y creo verlo de una forma lenta, tediosa, y un tanto
aburrida. Me hablan de unas personas que -al no seguirlo- desconozco, de unas
marcas -que no son más que simples tiempos, números,etc.- que no me puedo hacer
la idea de si es mucho o poco los logros que realizan, no me imagino -y
desgraciadamente en España, el esfuerzo para lograr las cosas no las elogiamos
ni valoramos para nada- y por tanto, no me valoro lo que cuesta correr 100m. en
8" o 9" o 15". Lo mismo con lanzamientos, saltos o otras
pruebas. Para el que no conoce, no lo valora.
Estamos en una época
y en una civilización donde se busca el espectáculo inmediato y si existe
cierto riesgo mejor. Tampoco en la
Fórmula 1 acostumbra a pasar demasiada cosa pero hay un
riesgo y un morbo detrás que engancha a cualquiera -todos nos podemos imaginar
lo que supone ir a 300km/h en coche-. En natación incluyen saltos de un
trampolín de 27m. donde, fuera de las vueltas y piruetas de los saltadores en
el aire, esperamos cómo será la caída. ¡Esto en el atletismo no sucede!
El atletismo es un
deporte donde el esfuerzo y la superación personal tiene un valor y es el cual
los que lo conocemos, valoramos, apreciamos y elogiamos pero nada más. Los
foráneos lo ningunean y eso nos deja al margen de una sociedad actual, lo que
nos lleva a que, en poco tiempo, nos quedemos sin verlo por televisión o
enterarnos de los resultados por la prensa. Suerte tenemos de internet y de las
redes sociales que son las que nos ayudan a estar al día y conocer en todo
momento aquello que esté sucediendo al respecto en cualquier parte del mundo.
Aquel que quiera ver
atletismo, tendrá que pagar su entrada e ir al estadio a disfrutar de los
atletas que bien merece la pena.
Pero una reflexión
debemos hacer si queremos que este deporte sea más visto y valorado -aunque nos
duela-: deberíamos hacer un gran giro al circo atlético, con nuevas normas, más
espectacular y vistoso y debería ganar dinamismo; aunque si se hiciese, quizás
no se llamase tampoco atletismo.